Destrozado, el corazón busca un infarto metafórico para acelerar la muerte afectiva. Camina calle tras calle hasta llegar al lugar, este barrio es marginado, prostitutas y travestidos le hacen la señal del ven. Se detiene a negociar los besos y las caricias. Es lo que hay Papi, Todo el servicio por trescientos pesos, Una mamada por ciento cincuenta, Vamos al hotel, yo pongo el condón, Mira qué chulo estás corazón. Por fin se decide, los pasos del corazón lo llevan a un cuarto sin baño. Mientras el sexoservidor se desviste el corazón se mira en el espejo que sí hay en el cuarto, mira su rostro triste, porque además de piernas y brazos este corazón también tiene rostro. ¿Qué ha sido del amor? Deja de pensar con su cerebro corazón y se decide a actuar, a penetrar en los misterios de la carne. Quizá sea lo único que vale la pena, quiere creer el corazón, lastimosamente aún la quiere, en su ser corazón vive el recuerdo de ella, pero hoy pagó para olvidar.
viernes, 8 de mayo de 2015
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario