El mundo es del tamaño de unas cuantas cuadras cuando te busco, y te encuentro. Estás brillante de noche. El perfume de mezcal te va muy bien, te pintas de verde para hacer resaltar esa sonrisa polivalente que te caracteriza. Porque en ti cualquier palabra y cualquier porqué. Y la guerra es azul y negra. Caminamos en dos ruedas por la avenida, esa misma avenida de marchas y bombas, te sigo, a donde vayas, voy de madrugada, en la humedad de un abrazo tuyo. La música suena y no habrá policía, chacal, inspector, ningún hijo de puta que pueda parar esta canción del verte, del quererte.
lunes, 14 de abril de 2014
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario